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Wednesday, September 22, 2010

Heb. 4:13—Heb. 4:13.

Miércoles 22 de septiembre
Todas las cosas están desnudas y abiertamente expuestas a los ojos de aquel a quien tenemos que dar cuenta (Heb. 4:13).
Hay quienes piensan que, si logran que nadie los vea, sus malas acciones quedarán impunes (Sal. 19:12). Pero, en cierto sentido, no existen los pecados ocultos. Jehová es un Juez que examina nuestros motivos más profundos y reacciona ante nuestros pecados con perfecta justicia. Este hecho se destaca en el caso de Acán, quien, desobedeciendo las órdenes divinas, robó parte del botín de la ciudad de Jericó y lo ocultó en su tienda, seguramente con la complicidad de su familia. Lo hizo a sabiendas de que era una grave ofensa contra Dios, pues cuando salió a la luz su mala acción, dijo: “He pecado contra Jehová” (Jos. 7:20). Su corazón, al igual que el de Caín, se había corrompido. En su caso, la codicia fue determinante y lo llevó a actuar con engaño. Como el botín de Jericó pertenecía a Jehová, en realidad le había robado a Jehová, un serio error que pagaron muy caro él y su familia (Jos. 7:25).

Wednesday, September 22
All things are naked and openly exposed to the eyes of him with whom we have an accounting.—Heb. 4:13.
Some may feel that if no one sees them do wrong, they will get away with it. (Ps. 19:12) In a sense, there is no such thing as a secret sin. Jehovah is a Judge who examines our deepest motives, and he responds to wrongdoing in a way that reflects perfect justice. In direct violation of God’s command, Achan took spoil from the city of Jericho and hid it in his tent, likely with the complicity of his family. When his sin was exposed, Achan showed that he realized the seriousness of what he had done, for he said: “I have sinned against Jehovah.” (Josh. 7:20) Like Cain, Achan had developed a bad heart. In Achan’s case, greed was a major factor, and it contributed to his becoming deceitful. Since the spoil from Jericho belonged to Jehovah, Achan in effect stole from God, and this cost him and his family dearly.—Josh. 7:25.

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