Pages

Tuesday, May 29, 2012

La aprobación de Dios nos conduce a la vida eterna



“Tú mismo bendecirás al justo, oh Jehová; como con un escudo grande, con aprobación lo cercarás.” (SAL. 5:12)
 

LA VIUDA de Sarepta y su hijo están hambrientos, y lo mismo le sucede a Elías. Cuando la pobre madre se dispone a encender el fuego para cocinar, el profeta le pide pan y agua. Ella no tiene ningún inconveniente en darle de beber, pero los únicos alimentos que posee son “un puñado de harina en el jarro grande y un poco de aceite en el jarro pequeño”. Por eso, cree que no puede ofrecerle nada a Elías, y así se lo explica (1 Rey. 17:8-12).
 


 Pero el profeta es insistente: “De lo que hay allí, hazme primero una pequeña torta redonda, y tienes que traérmela acá fuera, y para ti y tu hijo puedes hacer algo después. Porque esto es lo que ha dicho Jehová el Dios de Israel: ‘El jarro grande de harina mismo no se agotará, y el jarro pequeño de aceite mismo no fallará’” (1 Rey. 17:13, 14).
 

 La decisión que debía tomar la viuda tenía que ver con algo mucho más importante que el empleo de sus últimas provisiones. ¿Se preocuparía más por cubrir sus necesidades materiales y las de su hijo, o por obtener la aprobación y la amistad de Dios? ¿Confiaría en que Jehová podía salvarlos? Nosotros nos enfrentamos hoy a un dilema semejante. ¿Nos interesa más conseguir seguridad material, o recibir la aprobación de Jehová? Sin duda, tenemos sobradas razones para confiar en Dios y servirle. Y él nos ha explicado cuáles son los pasos que debemos dar para gozar de su favor.


¿Por qué no ver las Escrituras aquí?

BIBLIA EN LINEA

http://bit.ly/cZHJQJ

http://bit.ly/1rw0gT

http://bit.ly/ciF1LC

http://xchg.com

No comments:

Post a Comment