Recordando el consejo amoroso de su padre, Salomón relata: “Él me instruía y me decía: ‘Que tu corazón tenga firmemente asidas mis palabras. Guarda mis mandamientos y continúa viviendo. Adquiere sabiduría, adquiere entendimiento. No te olvides, y no te desvíes de los dichos de mi boca. No la dejes [a la sabiduría], y ella te guardará. Ámala, y ella te salvaguardará. La sabiduría es la cosa principal. Adquiere sabiduría; y con todo lo que adquieres, adquiere entendimiento’” (Proverbios 4:4-7).
¿Por qué es la sabiduría “la cosa principal”? Sabiduría es la capacidad de poner por obra el conocimiento y el entendimiento de modo que produzca buenos resultados. El conocimiento, es decir, el saber que se consigue mediante la observación y la experiencia o mediante la lectura y el estudio, es fundamental para conseguir la sabiduría. Pero si no tenemos la aptitud de poner por obra ese conocimiento, nos será de poco valor.
Conseguir entendimiento también es esencial. Sin él, ¿podríamos en realidad ver cómo se relacionan los hechos unos con otros y obtener un cuadro completo del asunto que examinamos? Si no tuviéramos entendimiento, ¿cómo podríamos percibir los porqués de las cosas y adquirir perspicacia y discernimiento? En efecto, para razonar sobre la base de los hechos conocidos y llegar a conclusiones correctas, necesitamos entendimiento (Daniel 9:22, 23).
No comments:
Post a Comment