Isa. 53:5—Isa. 53:5

Lunes 7 de marzo
Se le estuvo traspasando por nuestra transgresión (Isa. 53:5).
Isaías predijo que el Mesías sería rechazado, perseguido y traspasado, o ejecutado, y que cargaría con los pecados de la humanidad (Isa. 53:4, 7). Antes de venir a la Tierra, el Hijo unigénito de Dios ya sabía que la liberación de la humanidad tendría un costo muy alto para él: que sufriría terriblemente y sería asesinado. Cuando su Padre le dio a conocer este hecho, ¿se rebeló o se acobardó? Por supuesto que no. Aceptó de buena gana lo que le dijo su Padre (Isa. 50:4-6). Y cuando estuvo en la Tierra, también lo obedeció en todo. ¿Por qué? Él mismo señaló una de las razones al decir: “Yo amo al Padre”. Además, dijo: “Nadie tiene mayor amor que este: que alguien entregue su alma a favor de sus amigos” (Juan 14:31; 15:13). De modo que nuestra salvación se debe en muy buena medida al amor del Hijo de Dios. Aunque él tuvo que entregar su vida humana perfecta, estuvo dispuesto a hacerlo para salvarnos.

Monday, March 7
He was being pierced for our transgression.—Isa. 53:5.
Isaiah foretold that the Messiah would be rejected, persecuted, and executed, or pierced, to bear the sins of imperfect humans. (Isa. 53:4, 7) Before he came to the earth, God’s only-begotten Son was aware of what our deliverance would cost him. He would have to suffer terribly and then be put to death. When his Father taught him those truths, did he shrink back or rebel? On the contrary, he submitted willingly to his Father’s instruction. (Isa. 50:4-6) Likewise, while on earth, Jesus obediently carried out his Father’s will. Why? He provided one answer in these words: “I love the Father.” He provided another in these: “No one has love greater than this, that someone should surrender his soul in behalf of his friends.” (John 14:31; 15:13) So our deliverance is due, in large part, to the love of Jehovah’s Son. Though it cost him his perfect human life, he was glad to do it for the sake of our deliverance.